Si usted está esperando la llegada de un bebé y cree que los últimos meses “han sido una locura”, no se imagina el emocionante viaje que se aproxima. Especialmente en esas primeras semanas. Y si bien no existe ningún manual que cubra todos los escenarios, nunca están de más los consejos que pueda recolectar para preparar su hogar para la llegada de un recién nacido.
La limpieza con un bebé
Tener un ambiente limpio y desinfectado es muy importante, ya que los recién nacidos se exponen al mundo exterior y son muy frágiles. Limpiar los rincones de la casa, la ropa, alfombras, fundas, etc, para quitar el polvo y ácaros. Puesto que éstos pueden incomodar al bebé y/o causarle alergias e infecciones.
Especialmente si se tienen mascotas, báñelas con mayor frecuencia y manténgalas a una distancia precavida durante los primeros días.
Organización
Lo ideal es tener un cuarto ya preparado para la llegada de un bebé, donde haya espacio suficiente para su ropero, bañera, cambiador y cuna. Se aconseja que esté cerca del cuarto de los padres, que sea silencioso y tranquilo y además bien ventilado.
Saber donde está cada cosa le ayudará mucho, especialmente en aquellas madrugadas cuando se levante a atender a su bebé. No se preocupe si al inicio todo parece algo abrumador, es parte del proceso y con la experiencia se aprende.
Ajustes
Claro está qué hay que hacer que la casa sea apta para bebés y niños pequeños, esto implica retirar todos aquellos objetos que se rompan con facilidad, que sean calientes (ollas, estufas, etc) o que sean muy picudos o rasposos. Además, no hay que dejar a su acceso herramientas, medicamentos u objetos pequeños que puedan meterse a la boca.
También, es vital comprar protectores para los enchufes y para las esquinas de los muebles. Así como conseguir barandillas, para impedir que más adelante al gatear, el bebé ingrese a cuartos peligrosos como la cocina o escaleras.
Compras
Además de la ropita, pañales, biberones, juguetes, etc, también deberá conseguirle a su bebé una silla para el carro, un porta bebé, una carriola, silla de comedor, mecedora, entre otros artículos necesarios.
Claro está que no debe perderlo de vista, estar atento a sus reacciones y a su personalidad, al igual que a su estado físico en caso de presentar deshidratación o alguna infección. En dicho caso contacte inmediatamente a su pediatra.
Sin embargo, en cuanto al tema de vivienda, estos son los puntos más relevantes. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero no tema ni se estrese, disfrute esta nueva etapa junto a su bebé, infórmese, consulte con profesionales u otros padres experimentados. No está solo, tanto usted como su bebé aprenderán cómo vivir esta aventura juntos.
